HACER ALGO, LO QUE SEA, PERO ALGO

Esta mañana he tratado de recordar el momento preciso en el que compré, por primera vez, la revista, en aquel momento de cine, “Fotogramas”, viniendo a ser el año 92 y habiendo pasado, entonces, 15 años… 15 años en los que, mes a mes, he comprado esta revista. Hasta hoy. Y es que, cuando entre articulo y articulo, reportaje y reportaje, dossier y dossier, critica y critica etc, aparece de manera subversiva e irremediable algún comentario o reportaje o articulo o reseña u opinión sobre el mal generalizado y demiúrgico que supone la piratería o sobre lo alevosos y desconsiderados que son los “piratas” (lo dicen, textualmente ellos: no yo, incapaces de entender a quienes tratan de ver alguna película como, por ejemplo, “Vinyl” de Andy Warhol, o “Scorpio Rising” de Kenneth Anger, o “Faster, Pussycat, Faster” de Russ Meyer o tantas otras… que , claro, son tan fácilmente localizables en cualquier establecimiento o tan baratas si se pueden conseguir de importación) que buscan en la web páginas de descarga para atentar contra la moral establecida socialmente (ergo,económicamente) de las distribuidoras y discográficas, lo mínimo que puedo hacer, visto el sesgo que de un tiempo a esta parte ha ido adquiriendo esta publicación aparentemente hermanada con la Innombrable (seguro que no es gratis, por otro lado), es dejar de comprarla. Me joderá más o menos (más menos que más, si he de ser sincero) pero pensando que en el día a día es demasiado frecuente bajarse los pantalones ante el modo en el que todo está organizado, ferozmente burocratizado en una estructura simbiotica con el latido más poderoso, por lo que al menos en esto si podré ser yo quien decida, más aún cuando es TAN cansado leer mes si y mes también sus pueriles y párvulas catilinarias sobre la pirateria. Obviamente a esa revista le concederá a perder un COMPRADOR la misma importancia que doy yo a los fatuos ruego que en pos de la compra de originales que desde sus cada vez más demagógicas y agradecidas páginas se desprenden, que dudo que ni ellos mismos se los crean, pero bueno, al menos, es la elección que entiendo necesaria para seguir mirándome de vez en cuando en algún espejo. Lo triste es que esto no se extendiese, pero seguro que desde la Innombrable o desde las distribuidoras compensan estas eventualidades…. No importa entonces nada…. Son demasiado fuertes… han ganado.